Amanecía nuestro sexto día en Canadá y después
de visitar Parc Omega pondríamos rumbo a Ottawa, la capital de país.
A parte de albergar en su interior el Parlamento Nacional
y la residencia real del Gobernador, Ottawa se caracteriza por su mezcla de
culturas ya que la ciudad está divida de forma clara y diferenciada en dos
zonas: francófona y anglófona. Además de esta peculiar característica, Ottawa es una ciudad muy cómoda para visitar.
Todos los puntos de interés se encuentran
prácticamente juntos, lo cual hace que una ruta turística se convierta en un
agradable paseo.
Sin más demora, vamos a enumerar que ver y hacer en Ottawa:
1-VISITAR LA COLINA DEL PARLAMENTO (PARLIAMENT HILL)
Podríamos decir que nos encontramos en el corazón de Ottawa, así que nada mejor que comenzar la visita turista en este punto. La entrada principal al recinto está situada en la calle Wellington, pero antes de atravesar alguna de sus puertas nos dirigiremos al número 90 de la citada calle a por los tickets de la visita al interior del Parlamento.
El principal edificio es el Bloque Central de estilo neogótico y construido
en 1865. Está compuesto por la Casa de
los Comunes y el Senado, la Torre de
la Paz (es el símbolo de Canadá) y la Librería
del Parlamento. Los edificios se pueden ver por dentro mediante visita
guiada que realizan de forma sonriente estudiantes voluntarios. Es gratuita (recordar sacar los tickets en la calle Wellington) y se hace en inglés o francés.
Si os sobra tiempo podéis subir a lo alto de la Torre de la Paz.
El Bloque
Este contiene oficinas de Senadores y habitaciones recreadas en el estilo
de los primeros años de la Confederación. Este bonito edificio aparece en los
billetes de 100 dólares canadienses.
Justo en frente de los edificios parlamentarios podemos ver la “Flama” Centenaria que celebra el centenario de la Confederación Canadiense de 1867. Resulta que este monumento debía de estar expuesto durante un año, pero tuvo tan buena acogida por parte de la población canadiense que decidieron dejar la llama ardiendo para siempre.
Justo en frente de los edificios parlamentarios podemos ver la “Flama” Centenaria que celebra el centenario de la Confederación Canadiense de 1867. Resulta que este monumento debía de estar expuesto durante un año, pero tuvo tan buena acogida por parte de la población canadiense que decidieron dejar la llama ardiendo para siempre.
El recinto parlamentario tiene una superficie de 112.360 m2 y en
su interior se celebran todo tipo de eventos y festejos. Uno de los más
importantes tiene lugar el 1 de julio, que conmemora el día de Canadá. Para
ello montan un gran escenario en el centro de la explanada que hará que los
habitantes de Ottawa entren en júbilo el día señalado….. pero para los turistas
el escenario es un estorbo….no pudimos sacar ni una panorámica decente con tal
armatoste tapando el edificio central.
Tampoco tuvimos suerte con el espectáculo de
luces y sonido que se proyecta en verano por la noche, porque tiene su comienzo
el 2 de julio y para esa fecha ya no
estaríamos en Ottawa.
Web Parliament Of Canadá.
Web Parliament Of Canadá.
2-VER EL RINCÓN DE EINSTEIN EN EL HOTEL FAIRMONT CHATEAU LAURIER.
Tal y como indica su nombre, este hotel de 5 estrellas es una réplica de un castillo francés y está construido con piedra caliza, torrecillas y mampostería.
Además de estas características tiene una
situación privilegiada, justo al lado del Parliament Hill. Estos hechos han
contribuido a que en él se hayan alojado personajes ilustres. Entre ellos Albert Einstein, del cual se guarda el
escritorio que utilizó durante su estancia. Está situado en el hall y se puede
entrar sin problema para ver estos objetos.
3-PASEAR POR EL CANAL RIDEAU
Durante el verano el calor se apodera de Ottawa, y para escapar del sol nada mejor que pasear a orillas del Canal Rideau bajo la sombra de los árboles. Si por el contrario visitáis la ciudad en invierno el frío es tan intenso que sus aguas se hielan y el canal se convierte en pista de patinaje sobre hielo. El paseo está asfaltado y durante el trayecto podemos admirar edificos modernos, parques y puentes, entre los cuales podemos encontrar el típico repleto de candados.
El Canal Rideau está declarado Patrimonio de la Humanidad.
Lo más llamativo son las esclusas construidas
con la técnica slakwater, que consiste en inundar los rápidos fluviales gracias
a presas altas reduciendo así las excavaciones. Las 49 esclusas son maniobradas
a mano y el mejor lugar para observarlas es entre Parlament Hill y el Hotel
Fairmont Chateau Laurier.
4-ENTRAR EN LA CATEDRAL NOTRE DAME
Hemos de reconocer que el exterior de la iglesia no nos llamó especialmente la atención, salvo las dos torres plateadas situadas a ambos lados.
Pero nada más cruzar
la puerta quedamos maravillados al observar el interior de la Catedral. Altos
arcos, coloridas vidrieras, galerías superpuestas, grandiosas figuras bíblicas
y un altar que mide 15 metros de son solo unos ejemplos del estilo
neogótico que podremos observar. Una de las cosas que más nos gustó fue el
techo azul y estrellado.
La entrada a la
iglesia es gratuita, pero ruegan que no se visite durante la misa. Lo mejor es consultar
en la web los horarios de celebración del culto.
5-FOTOGRAFIARSE EN EL MAMÁN
Justo en frente de la Catedral de Notre Dame podremos ver la gran escultura con forma de araña de la artista francesa-americana Luise Borugeois. ¿Por qué se llama “Mamán”? Según su autora es un homenaje a su madre que era tejedora y muy astuta, “capaz de tejer la tela de los afectos y quedar atrapada en ellos”.
A todos nos gusta situarnos debajo de este
gran arácnido de 10 metros de altura, pero a los niños les resulta realmente
fascinante.
Al lado de la araña podemos ver la Galería
Nacional de Canadá ubicada en un vistoso edificio de cristal y granito verde.
6-COMPRAR EN BYWARD MARKET
Estamos ante uno de los mercados más antiguos y grandes de Canadá. En 1826 el constructor del canal Rideu, el Coronel By, propuso construir un mercado al aire libre entre George street y York street. Pero tenía que ser muy amplio para dar cabida a los coches de caballos que utilizaban los ganaderos y agricultores para traer sus productos. Con el paso de los siglos el mercado se ha convertido en uno de los lugares más pintorescos de Ottawa.
En él no solo encontraremos puestos con flores, fruta fresca, verdura y productos típicos de la zona. Además hay tiendas de artesanía, recuerdos, cafeterías, restaurantes, heladerías y boutiques. Si queréis comprar productos de arce aprovechar en este mercado que los precios son de los más reducimos que vimos durante todo el viaje.
Como curiosidad hay una panadería-café-bistro
llamada “Le Moulin de provence” en
la cual entró Obama a comprar galletas durante su visita a la ciudad en el
año 2009. Si lo deseáis podéis comer esas galletas, que como era de esperar se
llaman “cookies Obama”.
El mercado está abierto los 365 días del año y en las
calles más céntricas hay personas con una camiseta amarilla inconfundible que os proporcionarán toda la información necesaria. Web buyward-market.
7-CRUZAR EL PUENTE ALEXANDRA PARA IR A GATINEAU
Una vez visitado el centro de Ottawa lo mejor que podemos hacer es ir andando hasta el Puente Alexandra. Según bajamos dejamos a mano derecha el Parque Major’s Hill para llegar hasta un mirador que proporciona una estupenda panorámica del parlamento (es la fotografía de inicio del post), y de las esclusas.
El Puente Alexandara es un puente voladizo
que cruza el río Ottawa. Tiene una parte de madera para los viandantes y otra
asfaltada para los coches. Al otro lado
se encuentra Gatineau que pertenece
a la región de Quebec y en la cual se habla francés. Así que con solo atravesar
de puente cambiamos de provincia y de idioma.
8-VER EL MUSEO CANADIENSE DE LA CIVILIZACIÓN.
Nada más atravesar el puente Alexandra, junto al río, nos encontramos con el Museo Canadiense de la Civilización (por cierto, desde aquí las vistas del Parlamento también son muy bonitas).
Tal y como indica su nombre el museo muestra las diferentes culturas que han habitado el país a lo largo de su historia. Está dividió en cuatro salas:
La Sala Central está situada en el Gran Hall,
un gran espacio de seis metros de altura salpicado de tótems tradicionales,
casas de nativos y figuras como el Espíritu de Haida Gwaii.
La Sala de los Primeros Pueblos muestra cómo vivían
los indígenas canadienses, la Sala de Canadá recrea los momentos más destacados
de la historia del país y la Sala de las Personalidades Canadienses muestra
personas que han destacado en su historia.
Durante nuestra estancia pudimos ver una
exposición sobre la fiebre del oro, que en 1858 atrajo a miles de soñadores
hasta estas tierras en busca de fortuna, y una exhibición especial sobre
Napoleón producida por el Museo Camavalet-Histoire de París que ha prestado
durante un tiempo mobiliario, trajes y efectos personales de Napoleón.
Los niños tienen su propio espacio en el
Canadian Children’s Museum, donde podrán jugar y divertirse. Para ello han preparado una gran cantidad de salas perfectamente decoradas que hacen que parezca que estamos en un cuento. Hay un teatro con disfraces, un gran autobús antiguo, casitas
perfectamente equipadas, exposiciones de juguetes de otra época, una pantalla IMAX,etc. En resumen, se trata de un museo en el cual todo
está hecho para que los niños aprendan la historia de Canadá jugando. Nos gustó muchísimo. Os garantizamos que vuestros hijos no querrán salir de aquí.
El precio de la entrada es de 15$CAD adultos y 9$CAD niños de 3 a 9 años. Hay precios especiales para familias numerosas (para más información visitar la web).
El precio de la entrada es de 15$CAD adultos y 9$CAD niños de 3 a 9 años. Hay precios especiales para familias numerosas (para más información visitar la web).
9-OBSERVAR LAS ESTATUAS DE OTTAWA
Como hemos mencionado anteriormente visitar Ottawa es muy cómodo, pero además es divertido, porque la ciudad está llena de estatuas de todo tipo y estilos.
Una de ellas nos llamó especialmente la
atención. Se trata de un monumento a Oscar Peterson, un pianista canadiense de
jazz. Resulta que en este pequeño rincón donde está ubicado el piano se puede
escuchar su música.
Otras estatuas típicas que suelen salir en guías
de viajes son el “Monumento a la Reconciliación en Ottawa” y “The Famous Five”,
una escultura en homenaje a cinco mujeres que reclamaron sus derechos a
presentarse al Senado de Canadá.
En las zonas ajardinadas del Parlamento podremos ver un monumento a la Reina Victoria de Ottawa, una estatua ecuestre de la Reina Elizabeth II y las estatuas de Sir Robert Laird Borden (primer ministro de Canadá) y Lester B. Pearson (14º primer ministro de Canadá).
10-VER EL CAMBIO DE GUARDIA.
Todas las mañanas de verano tiene lugar en Parliament Hill el cambio de guardia realizado por la Guardia Ceremonial. Para ser miembro de esta banda hay que pasar una audición y a ella se pueden presentar músicos militares y músicos de colegios o universidades de cualquier lugar de Canadá.
Los soldados llevan un uniforme rojo y gorro fabricado con piel de oso y los gaiteros o “Pipers of the Cermonial Guard” visten con falda escocesa. Esta banda además de realizar el llamativo cambio de guardia, también da conciertos en el Rideau Hall.
Nosotros nos encontramos con la banda en
plena calle y la verdad es que es todo espectáculo verles desfilar y tocar sus
instrumentos a un ritmo super pegadizo.
+ 1 PERDERSE POR LAS CALLES DEL CENTRO.
Vamos a añadir un extra, un "+1" que consideramos también imprescindible.
Ottawa es una ciudad de contrastes y eso se manifiesta en las calles y edificios. Cerca del Parlamento predominan las calles peatonales llenas de tiendas, restaurantes y edificios emblemáticos que se envuelven con grandes torres de cristal. Así podemos ver como la primera Iglesia Bautista construida en 1857 está rodeada de moles modernistas (situada en la céntrica calle Elgin St).
Y con solo bajar un par de calles más nos
encontramos con barrios repletos de casas de madera, pequeñas plazas y zonas
ajardinadas que nos hacen dudar en cuanto a nuestra ubicación se refiere...¿no estábamos en una ciudad?.
✎ NUESTRO ALOJAMIENTO
Nuestro road trip por el este de Canadá estaba programado para pasar dos noches en Ottawa, y así descansar un poco del coche. Para cumplir tal deseo decidimos que el alojamiento fuera lo más céntrico posible para poder ir caminando a todos los lugares de interés. Nos alojamos en el Hotel The business Inn, en una habitación es estilo apartamento y situado a escasos 10 minutos andando del Parlamento.
Algo que nos gustó mucho es que en el desayuno podías coger unas bolsas que contenían agua fría, un yogur, una pieza de fruta y unas galletas, perfecto para tomar un tentempié a media mañana. Además en la tercera planta hay un cuarto con lavadora, jabón y secadora gratuita que por supuesto aprovechamos.
Como inconvenientes: algunas habitaciones del primer piso son muy ruidosas (justo debajo hay bares) y el parking que es muy pequeño y se llena enseguida.
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Nuestra visita en Ottawa llega a su fin, pero todavía nos quedan lugares fascinantes que ver, entre ellos las Cataratas del Niagará !!
Nuestra visita en Ottawa llega a su fin, pero todavía nos quedan lugares fascinantes que ver, entre ellos las Cataratas del Niagará !!
¿Tenéis alguna pregunta? ¿Queréis que os ayudemos a organizar vuestro viaje? Escribe y te contestaremos enseguida.
¿Tenéis alguna pregunta? ¿Queréis que os ayudemos a organizar vuestro viaje? Escribe y te contestaremos enseguida.
Gracias por visitar Trotajoches !!!!!
Este año vamos a la costa este con dos niños...a ver si sobrevivimos, jejeje
ResponderEliminarEl parking del hotel de Ottawa era gratuito? He mirado en la web pero no me da la opción parking....
Hola Amanda!!!
EliminarEstoy segura que vendréis encantados, es un super viaje.
El parking del hotel de Ottawa era de pago y encima es muy pequeño por lo que se llena enseguida. Nosotros conseguimos aparcar en una calle cercana al hotel que no tenia zona azul. Estaba a unos 4 minutos andando.
Que disfrutéis mucho en el viaje.
Un abrazo,
Alicia
Muchísimas gracias por explicar maravillosamente y de forma super ordenada todos los lugares a visitar. He tomado nota de todo.En breve comienza nuestro viaje.
ResponderEliminarMil gracias!!!!
Muchas gracias a ti por leer mi blog :)
EliminarEspero que disfrutes mucho del viaje, Canadá es un país fantástico que no deja indiferente a nadie.
Un abrazo,
Alicia