¿Estáis buscando una ruta de senderismo en Asturias para hacer con niños muy pequeños de 3, 4 o 5 años? La Senda de la Peridiella es vuestro destino, un camino lleno de encanto y sorpresas para los más pequeños de la casa.

✎ SITUACIÓN, CÓMO LLEGAR Y APARCAR.

La Senda de la Peridiella se encuentra en la localidad de Infiesto. Para llegar hasta el inicio de la ruta hay que dirigirse hasta el Santuario de la Virgen de la Cueva situado en la salida de Infiesto por la carretera AS-254 en dirección a Campo de Caso.

Junto al Santuario está el área recreativa de La Cueva, con piscinas, mesas para hacer picnic, zonas de juegos, bar y parking gratuito para dejar el coche.

✎ RUTA SENDA DE LA PERIDIELLA.

Después de dejar el coche en el parking del área recreativa nos dirigimos hasta el Santuario de la Virgen de la Cueva, junto al cual podemos ver un mapa orientativo de las diferentes rutas que se pueden hacer en la zona.

Todos quedamos maravillados con el enclave en el que está situada la capilla. Una cueva natural formada por una enorme roca cuya forma tan peculiar permite dar cobijo al santuario. Para completar el idílico paisaje tendremos que cruzar un pequeño puente bajo el cual discurre el río Mon o de La Marea, el cual nos acompañará durante la ruta.  

Una vez visitado el Santuario cruzamos un pequeño arco situado a la izquierda. El camino es amplio y llano por lo que no entraña ningún tipo de peligro para los niños.

No tardamos mucho en encontrar la primera sorpresa de la ruta, la puerta que conduce a la casa del ratoncito Pérez y su buzón personal.

Seguimos caminando y tras pasar una casa con la fachada azul volvemos a introducirnos bajo los árboles, no sin antes abrir bien los ojos ya que los duendes y sus casas salpican cada rincón del camino. 

La iniciativa de crear este mágico mundo en La Peridiella ha sido de Gely Cobián, una vecina que con su trabajo e imaginación han impulsado de forma notable el nombre de la senda haciendo que muchas familias vengan hasta aquí a descubrir sus encantos.

El primer tramo de la ruta termina cuando la carretera hace acto de presencia. Para continuar hay que cruzar, andar un poco por la misma y coger un camino que sale por la izquierda. Desde nuestro punto de vista es un poco peligroso transitar por la carretera, sobre todo con niños pequeños, por eso recomendamos dar la vuelta en ese punto y volver al santuario por el mismo camino. Seguro que al desandar el camino descubrís más detalles que os sorprenderán.

Para completar la jornada podéis comer en las mesas de picnic del área recreativa, los niños pueden jugar en el césped o darse un chapuzón en alguna poza del río.